Existen dos tipos de sondas: las magnéticas y las inductivas. Ambas tienen pros y contras y la decisión de escoger unas u otras dependerá de cada coche. Vamos a explicar como funciona cada tipo:

Las sondas inductivas necesitan que mecánicamente la sonda y la referencia pasen muy cerca siempre , 2mm de distancia de contacto. Esto puede ser un problema en coches antiguos o cuando se quieren disputar tramos de tierra donde se pone a prueba toda la mecánica de las ruedas, dirección, etc.

Las sondas magnéticas Blunik permiten que mecánicamente sonda y referencia puedan estar más distanciadas entre ellas, 10mm de distancia de contacto y por lo tanto hacer más fácil el montaje. Por otro lado, la referencia a instalar tiene que ser un imán y esto puede ser una ventaja para hacer fácil la colocación sobre la llanta como una desventaja, ya que puede dificultar la instalación en otros coches.

Las sondas magnéticas Blunik están diseñadas y fabricadas específicamente para montar en coches de rallys. Disponen de un soporte plano con 2 agujeros que permiten muchas opciones a los mecánicos para ponerlas a diferentes lugares de su coche.

Las sondas inductivas son sondas industriales diseñadas para aplicaciones de maquinaria industrial. Van roscadas y se desajustan.

En referencia a la temperatura que pueden aguantar,  ambos tipos de sondas aguantan una temperatura máxima de unos 110ºC, así que debes escoger el sitio más frio que puedas ya que los discos de freno pueden llevar a temperaturas bárbaras como 400ºC.

(Nota: no existen sondas de alta temperatura, es un mito. Antes de caer en la trampa mirate el documento técnico que dice qué temperatura aguantan)

Esperamos haberte ayudado en la elección de las sondas que más te convienen  para tu coche clásico. Cualquier duda nos puedes consultar siempre por e-mail a info@blunik.com

¡Mucha suerte en tu siguiente rally!