TODO EMPEZÓ...
La historia de Blunik empezó en el 2005, cuando Josep Maria Carreras, ingeniero, inventor y apasionado del mundo del motor se apuntó con su hija Esther al 1º Rally 1000 Millas, que salía de Barcelona y terminaba en el País Vasco.
El coche escogido fue el Dyane 6 blanco, el cual vistieron con algunas pegatinas a su propio estilo.
Durante los meses previos estuvieron creando un aparato electrónico para medir la velocidad más precisa que el odómetro del coche -porque la aguja del velocímetro del Dyane se mueve muchísimo!-, así que incorporaron reloj interno para poder calcular la velocidad y memoria interna para poder programarla.
¡Todo era una aventura! No teníamos ni idea de que aquel prototipo de cuatro botones blancos, pantalla azul y sin caja sería un futuro Blunik.